Tesoros de Beijing (I) Tres palacios privados
El Palacio de la Pureza Celestial o Qian Qing Gong, es uno de los edificios más hermosos de Beijing. Cuenta con unos exquisitos quemadores de incienso en la terraza. En el techo se ornamenta con una serie de finos figurines que se aprecian mejor desde las esquinas.
Hay una placa conmemorativa escrita en chino y en idioma mongol, así como varios adornos en bronce en forma de símbolos que aluden la justicia imperial y la rectitud. También destacan en este sentido, los cráneos y las tortugas, símbolos de la inmortalidad. Caminando al final de la terraza se puede apreciar un pabellón de piedra blanca. El propósito de estas construcciones no esta bien definido.
El palacio alguna vez incluyó la recámara del emperador, pero después bajo la dinastía Qing fue utilizado por el emperador como salón de recepciones. Hay cuatro quemadores de incienso instalados detrás del trono. Hay varios juegos de escaleras para llegar al trono. El trono también tiene candeleros, adornos de dragón y espejos. Las celosías son simplemente magníficas.
Definitivamente es un lugar que no puedes perderte en tus próximas vacaciones a China, disfrútalo y sumérgete en esta cultura mágica e inmemorial.