Exposición de Utagawa Kuniyoshi en Francia
A Utagawa Kuniyoshi (nacido en 1797 y fallecido en 1861) se le considera uno de los precursores de los mangas actuales y quizás sea por eso que es una figura muy reconocida, no sólo dentro de Japón, sino también fuera de ella.
En esta ocasión, el país de Francia ha querido homenajear su vida y su trabajo y le ha dedicado una exposición que estará abierta del 21 de marzo al 7 de junio, donde se trata de mostrar la vida y obra de este grabador japonés. De hecho, el director de la sección japonesa del Departamente de Asia del Museo Británico, Timothy Clark, declaró “su poderoso estilo gráfico, el dramatismo de sus imágenes y su capacidad para interpretar leyendas antiguas en beneficio de un público masivo le convierten en uno de los padres de los manga“.
Kuniyoshi fue un gran maestro de la escuela Ukiyo-e y fue uno de los más conocidos en dominar el arte del grabado japonés. Entre sus obras podemos encontrar una de las series de guerreros de las cuales hizo 51 dibujos diferentes (de las que se sacaron a la venta unos 8000 ejemplares); también fue de los primeros en utilizar las sombras y las perspectivas en sus obras.
Una de las más características, y que muestra que tenía un talento para burlar la censura nipona, es un grabado en la que pintó a varios actores del teatro kabuki (que estaba prohibido) con caparazones de tortugas o, en otra obra, aparecen las caricaturas de sus rostros como un graffiti.
Sus imágenes de héroes, que le hicieron famoso en su país, constituyen la parte más importante de la producción de ese artista aficionado a la narrativa. Kuniyoshi representa a sus héroes o forajidos luchando con todo tipo de monstruos como cocodrilos, pulpos, carpas o esqueletos gigantes.
Muchos de sus guerreros llevan el cuerpo adornado con tatuajes que se hicieron populares entre los gángsters de Edo (la antigua Tokio) y que aún hoy siguen sirviendo de modelo.
Pero además de esos mundos fantásticos, Kuniyoshi demostró también una febril actividad en otros géneros y temas: eróticos, cómicos, paisajes, imágenes de geishas o de animales que personifican a seres humanos, caricaturizándolos.